
Rubia, ¿qué haces aquí? Esto está lejos de tu barrio.
Y el dulce bisturí de la memoria, el viejo tacto de tu mejilla, me cortó.
Tómate algo conmigo antes de que ardan las aceras, de que la primavera acabe y cuéntame que hiciste en este tiempo, dime que estás bien.
Entremos aquí mismo, ¿te casaste? No me digas...
Jefe, un par de cañas.
Confiesa que me buscaste entre los escombros, en las ruinas del alma.
Dime que aún recuerdas el asiento de atrás del coche, los mirones del parque, césped en mis pantalones y la certeza de sentir
.Mirabas siempre al sur, joven y hermosa.
Decías que tras la autopistame esperabas para huir.
Mirábamos al sur, no fui tan lejos por no encontrar al otro lado las certezas que perdí.
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